Benjamin LacombeNunca se puede identificar cuál fue el día. Ni la semana. Quizá sí el mes... Pero lo cierto es que te vas dando cuenta de que el mundo ha cambiado a tu alrededor. La laxitud de tus párpados va dando paso a una mirada clara y brillante que los demás perciben. Te miran de otra manera. Sonríen... Y te encuentras riéndote a carcajadas, con una energía que no aciertas a descubrir de donde sale, rodeada de gente a quien apenas habías mirado en mucho tiempo y que te echaba de menos o te pregunta de dónde has salido... porque no dan crédito a la mutación que has experimentado.
Luz, luz y más luz. Luz que emana de otros y que te alcanza con tanta fuerza que sientes como tu cuerpo se estremece. Agitación pausada que te va marcando el ritmo sin necesidad de esa mano que antes te empujaba.
Marioneta sin hilos...
Y todo eso estaba ahí. Nada ha cambiado en esencia. Simplemente me esperaba paciente dándome tiempo a que estuviera preparada para poder verlo.
Luz, luz y más luz. Luz que emana de otros y que te alcanza con tanta fuerza que sientes como tu cuerpo se estremece. Agitación pausada que te va marcando el ritmo sin necesidad de esa mano que antes te empujaba.
Marioneta sin hilos...
Y todo eso estaba ahí. Nada ha cambiado en esencia. Simplemente me esperaba paciente dándome tiempo a que estuviera preparada para poder verlo.
1 comentario:
Veo que has cambiado el rojo de la energía por el verde de la sanación, prosperidad y esperanza.
Pues sí, todo está dentro de nosotros, tanto la LUZ como la SOMBRA. No seas dura contigo misma, hay que ser permisa a veces uno puede concederse el estar perezoso, apático o triste...pero sólo durante un tiempo, finalizado éste hay que volver a sonreír y emanar LUZ.
Me alegro que estés de vuelta Miss!
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